La gestión de residuos siempre ha sido uno de los principales desafíos de la Región de Valparaíso, principalmente porque venimos arrastrando en las últimas cinco décadas diversas problemáticas que se vinculan con su administración, precariedad de procesos, ausencia de tecnología y, en particular, la falta de una visión nacional sobre el rol de la ciudadanía, el sector público y privado hacia la mal llamada basura.
En todo Chile existen casi 40 rellenos sanitarios, que reciben residuos domiciliarios de distintas municipalidades. A este contexto hay que sumar más de 50 vertederos y más de 30 basurales. Lo preocupante es que muchos de estos espacios ya cumplieron su vida útil o bien están a pocos años de hacerlo. También suma como antecedente que Chile es el segundo país -después de Turquía- que más basura envía a rellenos sanitarios en la OCDE, calificación indicada en la Evaluación de Desempeño ambiental sobre Chile realizada en 2016.
La gestión de residuos es un desafío regional que parte desde la educación cívica. Lo importante es poder profesionalizarla, es decir, aplicar innovaciones y expertise para una gestión de residuos responsable. Sin embargo, la dificultad está en la poca gestión que han experimentado los rellenos sanitarios en Valparaíso y también en otras partes de Chile. Por tal motivo, es relevante crear y fomentar condiciones para mejorarlos. Lo anterior, a través de intervenciones que parecen sencillas, pero que requieren tiempo y también un trabajo colaborativo con las comunidades. Esto para poder levantar inquietudes y aplicar correcciones en procesos esenciales de impermeabilización, lixiviación, compactación y distribución.
La gestión de residuos se puede abordar mediante el diálogo público-privado, la educación en torno al reciclaje, la interiorización de prácticas laborales y domiciliarias con sustento en la economía circular, y, particularmente, con la atracción de talentos nacionales e internacionales especializados en la gestión de residuos y que serán los encargados idóneos para el desarrollo de proyectos e iniciativas que incluyan procesos de gestión de residuos de corto y mediano alcance.
La Región de Valparaíso podría transformarse en un referente en la gestión de residuos, primero resolviendo lo que no se hizo durante años y haciéndonos cargo de las omisiones de muchos rellenos sanitarios. La segunda etapa es trabajar con mayor confianza junto a expertos y otros actores, compartiendo puntos de vista, pero siempre tratando de preservar la aplicación de acciones concretas e inmediatas. El objetivo es colaborar e intercambiar buenas prácticas y experiencia para un Chile y una Región de Valparaíso más limpia y más conectada con las preocupaciones ciudadanas.
