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Dispositivos médicos claves para afrontar nueva crisis respiratoria

Dispositivos médicos claves para afrontar nueva crisis respiratoria

La lamentable muerte de una menor de dos años en San Antonio debido un cuadro de neumonía por virus sincicial, rememoró el dilema de la última cama. Esto, porque la única cama pediátrica disponible se encontraba en Arica, evidenciando la saturación del sistema de salud debido a la crisis respiratoria.

Así han vuelto a escucharse términos como camas UCI, ventiladores mecánicos, nebulizadores o mascarillas de oxígeno, ampliamente conocidos por la opinión pública durante la pandemia por Covid-19 y que, nuevamente, juegan un rol fundamental en la recuperación de pacientes con enfermedades respiratorias, especialmente niños y niñas.

“Existe una alta circulación de virus sincicial y parainfluenza, siendo especialmente crítico en niños y niñas pequeños. Hay que estar alertas si se observan signos de dificultad respiratoria en menores, tales como aleteo nasal, cianosis peribucal o distal (uñas moradas o alrededor de los labios), quejido respiratorio y hundimiento del pecho”, explicó Gabriela Garnham, gerenta general de la Asociación de Dispositivos Médicos de Chile (ADIMECH).

Según Garnham, la tecnología en salud segura y de calidad es vital para afrontar de manera oportuna y eficaz las patologías respiratorias. “Los dispositivos médicos acompañan en todo el ciclo de atención del paciente pediátrico con enfermedad respiratoria, desde su diagnóstico temprano hasta su tratamiento y rehabilitación”, afirma la ejecutiva.

“Tal como se observó durante la pandemia, un ventilador mecánico u otro dispositivo médico de calidad puede hacer una gran diferencia en la atención que se le ofrece al paciente”, añadió.

 

De lo simple a lo complejo

Para tratar las afecciones respiratorias, los usuarios de salud pueden acceder a dispositivos médicos de distinta clase y nivel de complejidad, desde sistemas de ventilación mecánica hasta dispositivos más sencillos, como los test de diagnóstico (paneles virales), mascarillas, nariceras y halos pediátricos, que se utilizan para dar soporte de oxígeno y regular su concentración.

“Por poner algunos ejemplos, los ventiladores mecánicos de última generación reducen la necesidad de sedación y ayudan a los pacientes a respirar solos rápidamente, disminuyendo la asincronía y el riesgo de infecciones. Los nebulizadores, en tanto, transforman un medicamento líquido en vapor fino, que ingresa directamente a los pulmones de manera fácil y cómoda, mediante respiraciones profundas y lentas. Mientras que los test de diagnóstico permiten identificar si un paciente pediátrico tiene virus sincicial o si un adulto mayor está con influenza, dependiendo de ello su tratamiento”, explicó Gabriela Garnham.

Hoy la tecnología en salud ofrece diversas herramientas para enfrentar las enfermedades respiratorias de manera eficaz, oportuna y segura.

“Las personas pueden confiar en que los dispositivos médicos de calidad les ayudarán a afrontar una crisis respiratoria, pero no por ello deben olvidarse de la prevención y el autocuidado, como el lavado de manos y evitar exponer a niños pequeños y adultos mayores a personas enfermas. En caso de necesitar atención, acudir al nivel primario y/o teleconsulta para no congestionar urgencias de clínicas y hospitales, donde es importante tratar a los pacientes más graves”, finalizó Gabriela Garnham.

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