Cada año, en nuestro país se celebra Halloween, costumbre que proviene principalmente de Norteamérica. Sin embargo, al igual que otras festividades como navidad o efemérides nacionales, no está exenta de riesgos, tanto desde la comida hasta los disfraces o artefactos que se utilizan para poder disfrutar de este famoso “día del miedo”.
Una de las primeras cosas que se debe poner atención en esta fiesta, es el uso de colorantes en la comida, sobre todo el de color negro ¿Por qué? Se ha observado que cada vez usan más el carbón activado como componente principal en el colorante para que la comida de Halloween tenga un aspecto negro. ¿Cuál es el problema que tenga carbón activado? El carbón activado se ha usado muchas veces con fines terapéuticos asociados a malestares gastrointestinales como antiséptico de las vías intestinales y también es utilizado en la intoxicación por medicamentos y otras sustancias tóxicas, disminuyendo la absorción del tóxico, y evitando que se alcancen niveles nocivos para el organismo.
Es justamente este último fin terapéutico, que está relacionado con los problemas que puede generar el uso de carbón activado en teñir alimentos para Halloween. El problema que se produce es que disminuye la absorción de medicamentos que se están tomando por vía oral, o sea puede disminuir la efectividad del tratamiento de personas, por ejemplo, con enfermedades crónicas como hipertensos, diabéticos o que tengan el colesterol alto. Este problema puede llevar a que por comer algo que se ve entretenido o rico, puede terminar en una tragedia, como hospitalización a causa de que sus medicamentos no le hacen efectos y se produzca una crisis o emergencia hipertensiva, una cetoacidosis diabética o incluso el desarrollo de un infarto.
Por tanto, antes de comer comida de color negro, hay que preguntar o chequear que el componente no sea carbón activado para evitar problemas sobre todo si usted usa medicamentos de forma crónica por vía oral.
¿Se debe tener cuidado con las pinturas que se ocupan en los disfraces en niños? La respuesta es: Sí. No todos las pinturas que se utilizan en los disfraces, como por ejemplo en las máscaras, son inocuos. En ese caso, sobre todo, los que se compran en mercado informal como en la calle. Algunos de estos productos que se venden de forma ilegal contienen plomo u otros componentes que están regulados o prohibidos en nuestro país, produciendo distintos problemas de salud como alteraciones del sistema nervioso (temblores), compromiso de conciencia o hasta convulsiones que pueden llevar a la muerte. Asimismo, se ha observado que la exposición crónica puede producir cáncer. Estos componentes tóxicos no sólo pueden aparecer en las máscaras, sino que también en el maquillaje que se usa para estas fiestas.
Por eso es importante, comprar productos en locales autorizados, chequear que venga con toda la información rotulada, etiquetada y con la aprobación de la autoridad sanitaria. De esta forma podemos evitar problemas y pasar una fiesta Halloween en familia sin ningún problema.