El aumento de las temperaturas, es una gran oportunidad para disfrutar del deporte junto a los niños y fomentar su desarrollo físico y emocional. Practicar actividades al aire libre en familia fortalece el cuerpo y, al mismo tiempo, crea momentos de conexión y diversión. Sin embargo, el calor puede ser un desafío, por lo que es importante tomar precauciones para asegurar que todos disfruten sin comprometer la salud. Aquí te compartimos cinco consejos prácticos para que, tanto tú como los más pequeños, se mantengan activos y seguros mientras comparten la pasión por el deporte.
Elige el horario ideal
Evita el calor más intenso, que suele darse entre las 11:00 y las 16:00 horas. Lo mejor es planificar las actividades físicas al aire libre temprano en la mañana o hacia el atardecer. Así, los niños pueden divertirse sin exponerse tanto a la radiación solar y el calor extremo.
Usa ropa ligera y protege su piel
Es importante que los niños vistan ropa liviana y de colores claros, idealmente con protección UV. Un sombrero o gorra que cubra bien el rostro también será de gran ayuda para prevenir quemaduras solares. Y no olvides aplicar protector solar de amplio espectro al menos 30 minutos antes de salir y reaplicarlo cada dos horas para asegurar una protección constante.
Mantén una buena hidratación
La hidratación es fundamental para evitar golpes de calor o deshidratación. Asegúrate de que los niños beban agua con frecuencia, incluso si no tienen sed. Llevar agua siempre a mano y hacer pausas para que tomen líquidos es clave en días calurosos.
Busca sombra y espacios frescos
Si el deporte se realiza al aire libre, optar por zonas de sombra o áreas cubiertas puede ser una gran opción para minimizar el impacto del calor. Actividades más tranquilas bajo los árboles o juegos acuáticos también son una forma divertida y segura de mantener a los niños en movimiento sin exponerse demasiado al sol.
Adapta las actividades según la temperatura
En el Colegio Seminario Menor de Las Condes, insisten en la importancia de ajustar las actividades físicas durante el verano. «Sugerimos que los niños realicen deportes en lugares cubiertos o bajo sombra, y que opten por actividades menos demandantes en días de calor extremo. La idea es que se mantengan activos, pero de manera segura», comenta Camila González, profesora y encargada del Área de Educación Física y Salud SPM.
Recuerda que el deporte debe ser una experiencia positiva para los niños, no una obligación. Adaptar las rutinas y tomar las precauciones necesarias hará que el verano se convierta en una excelente oportunidad para seguir promoviendo hábitos saludables de forma divertida y segura.