De buen ánimo se encuentra el técnico de Santiago Wanderers, Miguel Ramírez, quien aprovechó de bromear minutos antes del inicio formal de la conferencia de prensa semanal con los medios.
El gran tema es cubrir la plaza de volante central, donde Juan Pablo Miño está lesionado y descartado, mientras Francisco Alarcón suspendido. «Tenemos jugadores de muy pie y los vamos a aprovechar», explicó el estratega, quien analizó el juego de Coquimbo, próximo rival de los porteños, este viernes en la IV Región.