Buscar
Falleció Fernando Muñoz, histórica figura del peridismo deportivo nacional y del tango en Valparaíso

Falleció Fernando Muñoz, histórica figura del peridismo deportivo nacional y del tango en Valparaíso

El deporte, el tango, el periodismo, los micrófonos… las pasiones de Don Fernando Muñoz, periodista deportivo, conductor de programas televisivos y radiales, columnista en la prensa, gestor y animador del Festival de Tango de Valparaíso, actual Valparatango. Figura consular de los medios de comunicación en la Región de Valparaíso, que esta tarde, a las 17.27 horas, dejó de existir mientras permanecía internado en el Hospital Carlos van Buren de la ciudad puerto.

Una vida de 89 años (4 de abril de 1932) repartida en los micrófonos de las radios Cooperativa de Valparaíso, Nacional de Chile, Agricultura de Valparaíso, Festival de Viña del Mar, Valparaíso y Portales.

También en las pantallas de UCV Televisión con emblemáticos programas como Show de Goles y Deporte Visión, los que prolongó en el cable a través de las señales de Cablevisión y VTR con espacios como Deporte Elite, Eseaene y Ever for Ever, dedicados al seguimiento de los clubes Everton y Santiago Wanderers.

El básquetbol tampoco escapó a su mirada, especialmente en los primeros años de la Dimayor, cuando elencos como Sportiva Italiana, Árabe o Esperanza representaban a la ciudad puerto desde el Fortín Prat. también el tenis, el automovilismo, el atletismo, el vóleibol, las bochas, la hípica, las artes marciales, la natación, la equitación, la gimnasia y tantas otras disciplinas eclipsadas por el balompié, pero que siempre encontraron un lugar en sus espacios deportivos.

Sin embargo, fue en el tango donde Muñoz logró dimensiones que lo hicieron trascender mucho más allá de los programas deportivos. «Cartel de Tango» y sus millones de capítulos al aire fueron su hijo predilecto, sin embargo, el Festival de Tango de Valparaíso, actual Valparatango, fue obra mayor, evento que llevó la música del Río de La Plata al teatro municipal porteño y a las calles de la ciudad puerto, en un encuentro sólo interrumpido por la pandemia, en sus 30 años de existencia.

Nisiquiera la grave caída que sufrió cuando cayó del escenario en medio de una de las jornadas tangueras pudo sacarlo del espectáculo. Con fracturas y lesiones que perduraron por los años, Muñoz logró reponerse, sobreponerse e instalarse nuevamente en la vitrina del «dos por cuatro».

Pero, inquieto como era (bien lo sabía la señora Carmen, su esposa), también incursionó en la producción y gestión de espacios en medios de comunicación. Su productora EFEME, instalada en un edificio entre las calles Independencia y Pedro Montt, frente a la plaza Victoria, fue testigo del paso de diversos eventos ciudadanos y deportivos, títulos, descensos, caravanas y concentraciones desfilaron por la ventana de una oficina donde abundaban las grabadoras, cámaras de televisión, cintas de video, equipos de edición y miles de discos de tango, que se transformaban en la banda sonora de un departamento que albergó a uno de sus principales empredimientos.

Los premios fueron múltiples y todos merecidos, con reconocimiento a su desempeño desde regiones y también a nivel nacional. El Círculo de Periodistas Deportivos lo albergó entre sus filas, como socio honorario o permanente, su presencia en las asambleas no pasaba desapercibida.

Hombre de juicios tajantes y palabras veloces, de análisis crítico en la cancha y con amplio conocimiento de diversas disciplinas deportivas. Culto, de buen hablar y de enojos potentes ante la falta de rigor en el trabajo. Un dato incorrecto, una imagen no concordante o una instrucción técnica no acatada a tiempo eran motivos suficientes para que su tono cambiara y las cosas se hicieran algo ásperas… sin embargo, al final siempre resultaban bien.

Tal era su nivel de credibilidad y penetración en las audiencias, que sus recomendaciones con respecto a la ubicación del público en las tribunas de los estadios eran religiosamente obedecidas por los hinchas que seguían sus comentarios con una radio a pila en los oídos. Las masas se movían al ritmo de sus recomendaciones por el viento en Playa Ancha o el sol en Sausalito. Algo inimaginable en la actualidad, donde los asientos son numerados y las escalas no sirven como palco.

Respetado y querido, maestro de muchos, noble compañero de trabajo para otros y jefe de unos cuantos. Tuve el privilegio de mantener esas tres condiciones en televisión, en radio y en las actividades del Círculo de Periodistas Deportivos.

Hasta siempre Don Fernando, descanse en paz.

Por Germán Gatica Bravo, director G5Noticias.

 

noticias relacionadas

Ministra de Minería visitó Planta Catemu de CEMIN para conmemorar el Día del Trabajo
Masiva manifestación en Valparaíso por conmemoración del Día del Trabajador
Hasta el 10 de mayo se puede postular a curso de Mujeres Gasfiter de Esval en zonas afectadas por incendio
Serviu en territorios insulares: Avanza construcción de seis viviendas en el archipiélago de Juan Fernández

Súmate a nuestra multiplataforma con las señales en vivo