El Tribunal Ambiental acogió a trámite la demanda de reparación de daño ambiental en las dunas de Concón que presentó el alcalde de Concón, Freddy Ramírez, contra la empresa Reconsa, cuyo representante legal es Juan Ignacio Soza.
La demanda denuncia una serie de acciones de Reconsa que han causado graves daños al campo dunar, entre ellas la ocupación ilegal y obras de 1,1 hectáreas del área de amortiguación en el área protegida, el desplazamiento de arena de duna en pendiente para conformación de un talud artificial, la remoción de arena de duna milenaria y la remoción de vegetación dunaria y fragmentación de la continuidad natural de la duna.
El abogado Gabriel Muñoz de Duna Viva destacó que “la protección y preservación de las dunas es una obligación legal establecida por fallos de la Corte Suprema. Es muy valorable que el alcalde, luego de requerirlo DUNA VIVA, busque la protección del santuario dunar y perseguir a los responsables del daño que sea causado en ese sitio”.
Muñoz agregó que “la Corte Suprema, Contraloría General de la República y Tribunal Ambiental han establecido que el proyecto Costa de Montemar VI de Reconsa es ilegal y ha generado un grave daño ambiental en las dunas. El alcalde de Concón está cumpliendo la ley y defendiendo las dunas. Lamentamos que la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, siga mirando para el lado y no haya presentado ninguna demanda contra quienes han dañado las dunas en la zona de Viña del Mar, generando una situación de complicidad”.
Duna Viva es un movimiento de defensa de las dunas de Concón, formado por la Fundación Yarur Bascuñán y la Corporación Pro Defensa del Patrimonio de Viña del Mar.
