El diputado de Renovación Nacional por La Araucanía, Miguel Becker¨, junto a sus compañeros de bancada, Jorge Rathgeb, Andrés Celis, Diego Schalper, Marcia Raphael, Camila Flores, Ximena Ossandón, Frank Sauerbaum, Andrés Longton y Hugo Rey, ingresó un proyecto de ley que busca prorrogar la vigencia de las licencias de conducir vencidas o próximas a vencer, con el objetivo de dar respuesta a la grave crisis que hoy enfrentan las direcciones de tránsito municipales en todo el país.
Durante la pandemia el Estado otorgó diversas prórrogas a las licencias de conducir para evitar aglomeraciones. Sin embargo, esa acumulación generó un “efecto embudo” que hoy se traduce en largas listas de espera, imposibilidad de conseguir horas y miles de conductores en riesgo de quedar sin poder manejar, afectando especialmente a quienes dependen de su licencia para trabajar.
De acuerdo con cifras de la Asociación Chilena de Municipalidades, más de 800 mil chilenos se han visto afectados por esta situación. Solo en la comuna de Las Condes, se proyecta que cerca de 77 mil personas enfrentan la dificultad de renovar su licencia en plazos razonables.
En concreto, el proyecto ingresado por el parlamentario establece lo siguiente:
Prórroga por un año para todas las licencias cuyo control corresponda realizar durante 2025.
Prórroga por dos años para las licencias cuyo control correspondía realizarse en 2024, quedando habilitados sus titulares para renovar hasta 2026.
*Tras ingresar el proyecto, el diputado e impulsor de la medida, Miguel Becker, explicó que a propósito del colapso que están sufriendo las direcciones de tránsito a nivel nacional, están dejando sin poder trabajar a conductores profesionales y a ciudadanos comunes y corrientes”. Y añadió que “este no es un problema de los usuarios, es un problema de gestión del Estado y de las municipalidades. No puede ser que por falta de capacidad administrativa se termine castigando a quienes solo quieren trabajar y circular en regla”.
Además señaló que “los más afectados son los conductores profesionales, quienes dependen de su licencia para sostener a sus familias. Si no damos una solución rápida, miles de ellos quedarán sin empleo y expuestos a la informalidad”.
“Nuestro proyecto busca entregar tranquilidad a los chilenos, resguardar el empleo y dar tiempo a los municipios para ponerse al día con la enorme demanda que hoy no pueden atender”, finalizó.
