El alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, fue ultimado a tiros en la plaza principal de la ciudad mientras asistía al Festival de Velas el último 1 de noviembre. Se trata del sexto alcalde asesinado en México este año, y su caso ha desatado protestas en Michoacán.
El funcionario, conocido por su postura de «cero tolerancia» contra el crimen, fue atacado por un grupo de sicarios la noche del último 1 de noviembre, alrededor de las 20:00 hora local, mientras departía con cientos de personas, incluidos niños, en la Pérgola Municipal de Uruapan, durante el tradicional encendido del Festival de Velas por la Noche de Muertos.
Manzo Rodríguez, quien había sido electo para el periodo 2024–2027, recibió seis tiros y, aunque fue trasladado de inmediato al Hospital Fray Juan de San Miguel, falleció a las 20:50 horas debido a la gravedad de sus heridas. En el mismo ataque, resultó herido el regidor Víctor Hugo de la Cruz, quien se encuentra fuera de peligro.
Investigación tras el ataque
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Michoacán confirmó que la respuesta de seguridad inmediata logró el abatimiento de uno de los agresores en el lugar de los hechos. Escoltas de Manzo y la policía municipal —cuerpo en el que el alcalde confiaba— fueron responsables de abatir al sicario, según precisó el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch.
Las autoridades también lograron la detención de otras dos personas presuntamente vinculadas con el homicidio.
El fiscal general Carlos Torres Piña detalló que, «se logró la incautación de un arma corta de calibre 9 milímetros, así como siete casquillos percutidos”.
Esta arma de 9 milímetros ha sido vinculada con al menos dos eventos de agresiones previos entre grupos delictivos contrarios que operan en la región, ocurridos el 16 y el 23 de octubre.
El fiscal Piña también expuso que el ataque fue planeado, pues se cuenta con videos de cámaras de vigilancia siguiendo al agresor antes de cometer el crimen, e indicó que, “Hubo una planeación del homicidio, en el que intervinieron al menos dos personas”.
El esquema de seguridad y las advertencias del alcalde
Carlos Manzo, quien ganó la alcaldía como candidato independiente tras desmarcarse del oficialista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), había alzado la voz en diversas ocasiones en 2025 para exigir apoyo federal a la presidenta Claudia Sheinbaum para enfrentar al crimen organizado en Uruapan.
A pesar de las constantes amenazas y su activismo contra el crimen organizado, las autoridades federales aseguraron que el alcalde contaba con protección.
El secretario García Harfuch informó que Manzo disponía de protección federal y municipal desde diciembre de 2024, la cual fue reforzada en mayo de este año.
Ricardo Trevilla Trejo, secretario de la Defensa Nacional, reiteró que Manzo tenía comunicación directa y permanente con el Ejército y la Guardia Nacional, con quienes sostuvo al menos cuatro reuniones formales entre mayo y octubre para revisar su esquema de seguridad.
La atomización del crimen y la extorsión del aguacate (palta) en Michoacán
El asesinato de Manzo se enmarca en un contexto de seguridad crítica en Michoacán, donde la delincuencia se ha atomizado en los últimos 10 a 12 años. Uruapan es el núcleo de la potentísima industria agrícola del aguacate (palta) en el país, un negocio que exporta entre 3000 y 4000 millones de dólares anuales, principalmente a Estados Unidos, y emplea a unas 300 000 personas aproximadamente.
Estos pequeños grupos criminales aprovechan la vulnerabilidad de los productores medianos, quienes carecen de la capacidad económica para pagar seguridad privada que les permita enfrentar a estas mafias.
La Fiscalía estatal ha identificado que en Uruapan operan las organizaciones criminales autodenominadas como el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Caballeros Templarios, Los Viagras, Pueblos Unidos y Los Blancos de Troya.
Reacciones oficiales y protestas
La presidenta Claudia Sheinbaum condenó, “con absoluta firmeza el vil asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo”, y aseguró que su gobierno reforzará la estrategia de seguridad y garantizará que “no habrá impunidad”.
Sheinbaum convocó a una reunión extraordinaria a su gabinete de seguridad y reiteró que «toda la fuerza del Estado es la justicia», al rechazar la idea de retomar la “guerra contra el narcotráfico”, la cual calificó como un fracaso que “solo incrementó la violencia en Michoacán”.
El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, condenó “enérgicamente” el “cobarde atentado” y señaló que Manzo, «sabía todos los días que asumía un riesgo por su lucha contra la delincuencia”.
Mientras tanto, el crimen ha generado una fuerte indignación en Michoacán, donde se registraron protestas intensas. Cientos de habitantes de Uruapan acompañaron el cortejo fúnebre del edil, y se escucharon consignas como “¡Fuera Claudia! ¡Claudia asesina! ¡Fuera Morena”.
Grecia Quiroz, esposa de Manzo, pronunció un emotivo discurso durante el sepelio, al lamentar que, “mataron al mejor presidente municipal de México, que se atrevió a alzar la voz y a hablar con la verdad”.
En Morelia, capital del estado, las manifestaciones se tornaron graves el domingo, cuando los protestantes llegaron a ocupar el palacio de gobierno de la ciudad. Las movilizaciones continuaron el lunes, con marchas convocadas por estudiantes que enarbolaron playeras blancas y sombreros, en alusión al movimiento del alcalde, ‘El Sombrero’.
Cooperación Internacional
El caso también atrajo la atención de Estados Unidos. Christopher Landau, subsecretario de Estado (y exembajador en México durante el primer período de Trump), lamentó el asesinato de Manzo Rodríguez y aseguró que su país está, “dispuesto a profundizar la cooperación en materia de seguridad con México para erradicar el crimen organizado en ambos lados de la frontera”.
Consultado sobre este ofrecimiento, el secretario García Harfuch afirmó que México está abierto a la colaboración internacional.
“Si tienen información al respecto, por supuesto que la recibiremos. Como en este, como en cualquier otro caso, trabajamos con una estrecha colaboración con ellos en intercambio de información”, declaró.
Identifican al pistolero que mató a Carlos Manzo
Osvaldo Gutiérrez Vázquez, conocido como ‘El Cuate’, ha sido señalado como el responsable directo del asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Alberto Manzo Rodríguez, según ha revelado medios mexicanos
Fuentes federales de seguridad revelan que Gutiérrez Vázquez provenía de la colonia Miguel Hidalgo en Apatzingán, Michoacán, y mantenía lazos familiares con un sujeto apodado ‘El Prángana’, un operador clave de los hermanos Álvarez Ayala —Ramón («R1») y Rafael («R2»)—, facción delictiva aliada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).