La Cruz Roja Chilena y Dirección Meteorológica de Chile (DMC) firmaron un Memorándum de Entendimiento para reforzar la preparación y respuesta frente a emergencias climáticas y desastres en el país.
El convenio interinstitucional está enmarcado en la Acción Anticipatoria en Chile y la región, un mecanismo de intervención humanitaria que utiliza los sistemas de alerta temprana y pronósticos científicos, promoviendo la coordinación local y con ello disminuyendo las vulnerabilidades comunitarias en el proceso de adaptación al cambio climático y los efectos que este tiene en la recurrencia e intensidad de las diversas amenazas socio naturales.
El documento promueve un intercambio de información meteorológica para fortalecer el desarrollo de los Protocolos de Acción Temprana (PAT), asegurando datos validados técnicamente y un acompañamiento permanente en todas sus etapas: desde el diseño inicial hasta la ejecución y los ajustes posteriores.
“Este acuerdo es la materialización de nuestro compromiso como servicio público. No solo pronosticamos el tiempo, sino que trabajamos para proteger a las personas. Esta alianza con la Cruz Roja nos permite asegurar que nuestra ciencia llegue a quienes más lo necesitan, transformando un dato técnico en una acción que puede salvar vidas”, afirmó el Director de la DMC, Reinaldo Gutiérrez.
¿En qué beneficia la Acción Anticipatoria?
“Al brindar un soporte a las comunidades expuestas a una amenaza, antes que esta les impacte, reduce el nivel de afectación y con ello, se reduce el gasto futuro en procesos de respuesta, junto con desarrollar comunidades más preparadas, coordinadas y conocedoras de los sistemas de prevención y respuesta a nivel nacional, permitiendo que las instituciones de respuesta puedan llevar a cabo sus labores de mejor forma”, señaló Diego Araya, Coordinador Nacional de Acción Anticipatoria de Cruz Roja Chile.
En esa misma línea, el Director de la DMC subrayó, “nuestra misión es alertar oportunamente sobre los riesgos del tiempo y del clima, y esta alianza la fortalece al tender un puente directo con la acción humanitaria”.
“Ahora, nuestras alertas no solo informan, sino que activan una respuesta organizada en terreno, haciendo que nuestra labor sea más efectiva en la protección de la ciudadanía frente a los crecientes desafíos climáticos”, agregó.
Es importante destacar que no es lo mismo la preparación que la Acción Anticipatoria. La preparación abarca un largo proceso de análisis, diseño, educación y mitigación frente a diversas amenazas, mientras que la Acción Anticipatoria es un recurso adicional ante una amenaza específica que supere los umbrales habituales. Se implementa con la existencia de un pronóstico científico que permita una ventana de tiempo donde actuar antes del
impacto, requiere medidas y financiamiento pre acordados, con mecanismos de activación pre establecidos y validados técnicamente, todo esto establecido en un documento llamado Protocolo de Acción Temprana (PAT) que se socializa y coordina con las comunidades e instituciones locales.
Finalmente, el memorándum permitirá el intercambio de información meteorológica, el desarrollo de estudios conjuntos y la conformación de mesas técnicas frente a fenómenos extremos como olas de calor, lluvias intensas e inundaciones. Con ello, se refuerza el compromiso de la DMC y la Cruz Roja en la adaptación al cambio climático y la reducción de riesgos de desastres, con especial foco en la protección de las comunidades más vulnerables.